DISCIPLINA IMPUESTA

La propia institución escolar puede ser responsable de generar niveles altos de ansiedad en los alumnos y actitudes de rechazo ante cualquier normativa disciplinaria como sería en caso de implantar normas inadecuadas o incoherentes, falta de coordinación entre los profesores del centro en temas referentes a la disciplina, infracciones de los propios docentes en el ejercicio de su actividad (retrasos, ausentismo, falta de interés o dedicación, etc.) o sistemas de evaluación inadecuados.

Los profesores autoritarios establecen reglas y normas de forma impositiva y no están dispuestos a la negociación o explicación sobre su necesidad, genera dependencia, tensión y miedo en el grupo (aunque en algunos casos mejora el rendimiento académico).